Tuve mi primer orgasmo a los 17, Estaba sentada en el escritorio de la escuela cuando de repente, sentí un pulso húmedo en mi área genital. Mi vagina se encendía y no pude pensar coherentemente. Era como si alguien estrujara mis pensamientos, yo estaba como, ufffffffff!!! ¿Qué es eso? Se sintió realmente erótico y bien, pero también estaba alucinando, con miedo y confundida. Después de eso, comenzó a suceder varias veces en el mismo día.
Esta situación se fue hacienda peor, durante mi Segundo semestre en la preparatoria, contaba orgasmos en una hoja de papel, estaba teniendo de 100 a 200 al día. Corría para esconderme en el baño entre clases para aliviar la presión.
Para cuando comencé la universidad, los orgasmos se volvieron más intensos y distractores primarios de mis pensamientos, tenía problemas para concentrarme, me deprimía, no sabía que me estaba sucediendo y no se componía la situación. Le dije a todo mundo en quien confiaba de mi condición. La gente me decía cosas como “que suerte tienes” o “Quiero salir contigo”, no entendían porque yo quería que esta situación desapareciera, y me etiquetaron como una “histérica”. El psicólogo de la universidad pensaba que yo estaba loca. En el segundo año compré muchísimos vibradores y consumía tranquilizantes.
Mis padres no entendían lo que pasaba, me sentía incomoda y rechazada. Mi madre es muy conservadora, es un problema decir la palabra “orgasmo” en voz alta, y se emparanoió cuando vio que tenía mis propios juguetes me decía que era una pervertida.
Cada vez que hago algo tengo que evaluar la situación, ¿Dónde estoy? ¿Hay otras personas al rededor? ¿Qué sensaciones tengo? ¿Si no tengo un lugar privado en ese momento, las cosas se pueden complicar? ¿Puedo hacer ruido? (hacer sonidos vocales no es necesario pero me ayuda mucho a relajar la presión).
Evito cosas que desencadenen s esta sensación – Cosas como música con bocinas potentes, vibraciones como las de un tren o en un automóvil, aire frío, sustancias pegajosas, la obscuridad, el estrés, películas de miedo, películas románticas, roces inesperados, tener la vejiga llena ( En realidad no tengo control de mi sexo). Mirar escenas de sexo no me provoca nada, pero el otro día, cuando un amigo puso su mano en mi espalda, encontré realmente difícil de contener un orgasmo a gritos. Si mi ritmo cardiaco se acelera muy alto y por mucho tiempo, exploto. Evado el ejercicio, ni pensar siquiera en sentir el roce de una bicicleta o de mis piernas rozando mis labios.
Una vez estaba abrazando a un pariente y sentí inmediatamente como un orgasmo me ganó. Realmente me sentí sucia y que estaba completamente mal, aluciné, así que ahora evito los abrazos en general al menos que yo lo deseé.
He estado con mi novio por mucho tiempo pero no hemos tenido sexo. No sé si estaré lista para hacerlo porque de hacerlo tendré un dolor insoportable de placer. Sin embargo algunas veces desearía que pudiera tener sexo con él porque se lo merece, pero solo quiero que me tome de la mano sin sentir esa sensación inapropiada.
La semana pasada fui al cine y tuve que dejar dos veces la sala porque sentía que estallaba, cada vez que corría al baño (me asomaba para ver si no había nadie) entonces me encerré en un baño, abrí las piernas, pegué mi espalda a la pared y dejé que mi orgasmo corriera, me perdí como 15 minutos de la película…
Mis orgasmos son como una broma cósmica, no sé porqué me sucede a mi, sin embargo he aprendido a vivir con estos espasmos y no quiero que se me quite nunca, por extraño que parezca , esta circunstancia apareció en mi vida, siempre tendré que mirar por encima de mi hombro, para darme mi placer , autentico y lindo placer que mi vagina me pide agritos cada que le da la gana.
Ahora si me disculpan, voy a la cama con mis juguetes…
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